Este año nos ha tocado a nosotros ir de viaje a la nieve. Nos hemos alojado en un hotel al lado de las pistas.
Solo hemos ido cuatro alumnos: Celia, Ximo, Alfredo y yo. Nos acompañaban unos alumnos del colegio de Masalavés, de Carcagente y Alzira; todos juntos sumábamos 52 escolares y 5 profesores.
El trayecto era tan largo que nos dio tiempo a ver dos películas (Los viajes de Gullivert y Poul), hablar mucho y escuchar música. Después de 10 interminables horas llegamos al hotel justamente cuando empezó a nevar, ¡qué ilusión!
Celia y yo compartíamos habitación con dos niñas de Carcagente, Paula y Pau, y Berta de Masalavés. Después de instalarnos fuimos a probarnos las botas. Por la noche me costaba dormir; estaba pensando en el dia que me esperaba.
Al día siguiente empezamos a esquiar, ¡qué nervios! ¡Aún no me lo creo, no me caí ninguna vez! Creo que estaba bastante bien para ser la primera vez que tenía unos esquís puestos a mis pies. Así que cada día iba aprendiendo más cosas y mejorando el deporte tan magnífico que acababa de conocer. El segundo dia mi profesor Vicent me llevó a las azules, eso quería decir que estaba ya al nivel de una aventura de nuevas caídas; pero no ocurrió nada grave, te levantas y empiezas de nuevo. ¡Ah! Lo que menos me gustó fue los trompazos que me llevé por la percha en intentar subir; pero al final la batalla la gané yo, acabé dominandola, ja, ja, ja.
Por las noches habían actividades de animación, por ejemplo la jincana, el futbolín, el ping pon y la última noche había discoteca.
Al volver hicimos un concurso de canciones, y el premio fue... ¡¡¡QUEDARSE AFÓNICOS!!!
Fue una lástima la desaparición de la cámara, pero Vicent, no te preocupes: las mejores imágenes estan almacenadas en nuestra memoria y nadie nos las puede robar.
¡Mira si me lo he pasado bien que estoy pensando en repetir sexto! Bueno, creo que será mejor que no, pero espero que nuestros compañeros del colegio puedan disfrutarlo como nosotros.
Hotel Port Ainé 2000
Gracias a todas las personas que me han ayudado a poder realizar el viaje, comprando camisetas, colonias, lotería, bombones y polvorones, y sobretodo a mis padres por su ayuda y darme la oportunidad de realizar el viaje.